... y la vida continua

Me encuentro sentado frente a la computadora, observo las teclas negras con letras blancas, el cursor titilando sobre la pantalla esperando pacientemente una orden para escribir algunas letras, la luz de la ventana se refleja sobre la recamara, el celular al lado esperando a ser revivido por un mensaje, la cámara en una esquina reposando después de haber estado encendida tras una breve sesión y la persona que escribe esto pensando en que más poner, tratando de sacar lo que siente dentro por medio de palabras y utilizando este espacio para desahogarse. 

Un sentimiento recorre mi interior como si fuera agua salada que inunda mi corazón, a veces ese pequeño musculo que no tiene nada que ver con el amor y si con la vida me duele de tal manera que siento que solo me lleva a conocer a las personas equivocadas, en fijar mi vista en gente que está comprometida y mucho más en gente que no puede tener una relación estable, cuando me doy cuenta de ello solo escucho aquella risita burlona que me hace pensar que no se cruzará nadie en mi camino, solo personas pasajeras que me llevaran a tener un momento de diversión, solo eso, diversión pasajera, ellas tomaran su rumbo y yo seguiré mi camino donde tal vez me cruce con otra persona pero esa persona será la misma historia que vengo contando.

Un momento

Son pasadas las 3 de la tarde, caminamos juntos, el cielo está nublado y el aire poco a poco empieza a enfriarse, la gente camina por todos lados y nadie se fija que pasa a su alrededor, la existencia de aquel momento pasa a segundo término sobre el estrés y la vida ajetreada de ésta Ciudad y aquí seguimos caminando, buscando el momento, sintiendo la presencia de nuestros sentidos, levantando la copa de la imaginación y esperando que el viento nos alimente con su sabiduría ancestral. De repente los árboles nos indican el camino, la lluvia nos dibuja el sentimiento, la tierra se abre ante nosotros y seguimos aquí, buscando el momento, sintiendo los pasos de nuestra vida, tocando con las palmas de las manos un instante imaginario de futuras posibilidades, caminamos sintiendo el frío, acariciando la lluvia, respirando el éxtasis de aquel momento...

punto y coma

Abro los ojos y miro el tiempo, observo como pasa tan rápido y tan lento al mismo tiempo que no me doy cuento que en un abrir y cerrar de ojos la vida no espera a que te despiertes.

Empiezo a retomar las riendas de este espacio... veremos como salen las cosas en este regreso..