... y la vida continua

Me encuentro sentado frente a la computadora, observo las teclas negras con letras blancas, el cursor titilando sobre la pantalla esperando pacientemente una orden para escribir algunas letras, la luz de la ventana se refleja sobre la recamara, el celular al lado esperando a ser revivido por un mensaje, la cámara en una esquina reposando después de haber estado encendida tras una breve sesión y la persona que escribe esto pensando en que más poner, tratando de sacar lo que siente dentro por medio de palabras y utilizando este espacio para desahogarse. 

Un sentimiento recorre mi interior como si fuera agua salada que inunda mi corazón, a veces ese pequeño musculo que no tiene nada que ver con el amor y si con la vida me duele de tal manera que siento que solo me lleva a conocer a las personas equivocadas, en fijar mi vista en gente que está comprometida y mucho más en gente que no puede tener una relación estable, cuando me doy cuenta de ello solo escucho aquella risita burlona que me hace pensar que no se cruzará nadie en mi camino, solo personas pasajeras que me llevaran a tener un momento de diversión, solo eso, diversión pasajera, ellas tomaran su rumbo y yo seguiré mi camino donde tal vez me cruce con otra persona pero esa persona será la misma historia que vengo contando.